Con el slogan “deja respirar a los abuelos: este año tenemos ludoteca infantil” queremos llegar a todos aquellos cinéfilos que, por su condición de padres, encuentran dificultades para venir a disfrutar de los cortos del festival.

Una novedad muy destacable de esta edición es sin duda la oferta que hace el FESCIGU para los papás. La organización ha diseñado una serie de actividades realmente atractivas y pedagógicas para que los más pequeños estén entretenidos y aprendan a través de talleres temáticos, mientras sus papás pueden estar tranquilos viendo sus cortometrajes favoritos. El servicio de Ludoteca Infantil cuesta tan sólo 2 euros (un euro a partir del segundo niño), estará disponible todos los días del festival, durante el horario de las proyecciones, y está dirigido a los pequeños de entre 3 y 12 años de edad. Cuenta con 30 plazas, y una vez cubiertas no es posible admitir más niños.

Para poder disfrutar de este servicio es necesario:

1. Que hagas una reserva previa llamando al teléfono 606 642 451 o al 949 230 937. En caso de acudir a la Ludoteca sin reserva previa, es posible que no podamos admitir a un niño, si el cupo de reservas supera al de plazas disponibles.
2. Presentar la entrada que has comprado para el día indicado.
3. Dejarnos un teléfono móvil que te comprometas a tener encendido y con vibración (no olvides quitar el sonido al entrar a las proyecciones), por si tuviéramos que avisarte.
4. Firmar un documento en el que declaras conocer y respetar las normas de la Ludoteca (las puedes consultar más abajo).
5. Que nos traigas a tu hijo o hijos.

• Las plazas están dirigidas a niños de entre 3 y 12 años de edad. Queda a discreción del personal de la Ludoteca la verificación o estimación de la autenticidad de la edad declarada por los padres.
• Los padres deberán presentar su entrada al FESCIGU para poder disfrutar de este servicio, y no podrán abandonar el Auditorio Buero Vallejo bajo ningún concepto mientras sus hijos estén en la Ludoteca.
• Los padres facilitarán un número de teléfono móvil que se comprometen a tener encendido (con vibración durante las proyecciones) para ser localizados rápidamente en caso de que sea necesario.
• Los padres informarán al personal de la Ludoteca de cualquier aspecto relevante sobre sus hijos que deba ser tenido en cuenta para su correcto cuidado.
• Los padres informarán al personal de la Ludoteca en caso de que sus hijos tengan algún tipo de alergia a nivel tópico a algún producto como plastilina, pinturas, pegamento...
• En el caso de que un niño requiera cuidados especiales, esto deberá ser comunicado al personal de la Ludoteca.
• El abono por niño se realizará al dejar a estos en la Ludoteca. A su llegada, el responsable del menor deberá identificarse y decir quién o quienes irán a recogerlo. A la salida se exigirá el DNI para identificar a la persona que lo recoge, y deberá ser una de las personas indicadas por el responsable que dejó al niño en la Ludoteca.
• El personal de la Ludoteca no administra ningún tipo de medicación.
• Los niños que acudan a la Ludoteca deben tener pleno control de esfìnteres.
• El personal avisará a los progenitores para que pasen a buscar al niño si su actitud no es la adecuada e impide el curso normal de las actividades.
• Los niños deben respetar las normas de los talleres como guardar su turno, y no gritar ni empujar. En resumen, tener una actitud de respeto hacia sus compañeros.
• No nos hacemos responsables de la indumentaria que se manche con los productos de los talleres. Estas manchas con un simple lavado suelen desaparecer pero dependiendo del tejido puede quedar algún rastro.
• No nos hacemos responsables de la pérdida o rotura de juguetes u otros objetos que los niños pudieran llevar a la Ludoteca. En cualquier caso, desaconsejamos que los niños traigan sus juguestes.
• La organización del FESCIGU cuenta con personal cualificado y con experiencia en el cuidado y atención a niños. No obstante no nos podemos responsabilizar de cualquier accidente que el menor pudiera tener durante su estancia en la Ludoteca debido a causas ajenas a nuestra voluntad, tales como caidas, peleas entre niños, golpes con el mobiliario, etc.