Breve historia de Cinefilia
CINEFILIA es una productora alcarreña nacida en 1996 para dar continuidad al trabajo que iniciamos con el rodaje del mediometraje "La Puerta".
Hubo una primera etapa muy activa en el campo de la producción, en la que rodamos la mayoría de nuestros cortometrajes: "The onion experience" (1996) rodado en Hi8, "Terio, el suicida" (1997) rodado en SuperVHS, "Mi película favorita: el beso sangriento" (1998) rodado en SuperVHS y "Noveno Ve" (1999) rodado en DVC-Pro. Tras el estreno de este último corto, que fue un gran éxito en varios festivales, ganando varios galardones nacionales, nos planteamos dar un salto importante en nuestras producciones, con proyectos más cuidados, con un presupuesto mucho mayor, y reclutando un equipo humano con más experiencia. El resultado de ello fue que tres años más tarde estrenamos "250 bocadillos de mortadela", rodado en Betacam Digital y kinescopado a 35mm. Este cortometraje supuso un salto definitivo en la trayectoria de Cinefilia, pero también un gran descalabro económico, dado lo ambicioso del proyecto. Por ese motivo, tuvimos que plantearnos una nueva producción mucho más humilde en cuanto a los requisitos y optamos por realizar un re-make de "The onion experience" al que titulamos "Cebolla" (2004), rodado en miniDV, con equipamiento propio, con dos actores y sólo tres localizaciones frentea a los más de 20 actores, más de 100 extras y más de 15 localizaciones del trabajo anterior.
Sin embargo, "Cebolla" no obtuvo el resultado que esperábamos en los festivales en los que fue seleccionado. Además, desde 2003 la asociación comenzó a organizar el Festival Nacional de Cine de Guadalajara, que dos años más tarde fue rebautizado como Festival de Cine Solidario de Guadalajara (FESCIGU). La organización de este evento nos apartó en gran medida de acometer nuevos proyectos en el campo de la producción, por lo que desde el estreno de "Cebolla" tan sólo fuimos capaces de rodar un cortometraje, "La presa número 7" (grabado en HDCam), cuyo pre-estreno ha sido programado este año en el FESCIGU.
Es probable que el FESCIGU tenga los días contados por falta de apoyo institucional, por lo que es previsible que en un futuro próximo volvamos a redirigir nuestros pasos hacia el campo de la producción.