[...] Yo digo que los valores se educan con el ejemplo, no se educan con las palabras [...]
FAMILIA Y SOCIEDAD
¿En España tenemos una sociedad educada?
Pienso que no. Yo soy muy crítico con España, no solamente con la sociedad española sino también con el propio profesorado español. Creo que deberíamos de formarnos todos un poco más. La importancia que se le da a la educación es mínima, éste es el motivo fundamental por el que España sigue siendo todavía un país culturalmente subdesarrollado.
Y en cuanto a educación cívica, ¿cómo andamos en este país?
Una de las cosas que más me molestan y me cabrean de España es que a lo largo de un día te puedes encontrar con quince, veinte personas que están incumpliendo las normas. Gente que aparca en zonas para personas con movilidad reducida, que tira colillas a la calle, que deja botellas de cristal en cualquier parque, que abandona animales. España es uno de los países con mayor abandono animal. Esta serie de cosas me preocupan porque no tenemos conciencia de que todos formamos parte de una sociedad y de que somos el ejemplo para esos menores que estamos educando. Yo digo que los valores se educan con el ejemplo, no se educan con las palabras.
Los últimos estudios sociológicos apuntan que la sociedad influye en la educación un 60%, la familia un 30% y el colegio un 10%. ¿Estás de acuerdo con estos porcentajes?
Sí. Es cierto que nosotros les damos una cierta formación, pero a nivel de influencia les afectan mucho más las redes sociales, las amistades o la propia familia. Es verdad que cuando damos con un caso muy particular en que nosotros hemos puesto una semillita en un alumno y luego te dice que yo he estudiado esto gracias a ti o me dedico a hacer estas cosas porque tú me lo descubriste, es una experiencia fantástica, y a mí me ha pasado. Pero también es cierto que lo que tú haces muchas veces en el colegio lo pueden destrozar los padres o el entorno social en cinco minutos.
Si parece que la escuela influye en la educación un escaso 10%, ¿por qué se culpa al colegio y a los maestros de todos los problemas de este país?
Creo que es una falta de responsabilidad social y de los padres. El colegio está cansado de recibir problemas que genera la sociedad. Porque cuando se habla del acoso escolar se dice que hay que intervenir en la escuela; no, hay que intervenir en la sociedad que es la que lo genera. Pasa igual que con la obesidad, se supone que hay que intervenir en los colegios para que los niños no sean obesos, pero nosotros no les damos bollería industrial, son los padres los que se la compran, y sin embargo el problema lo tiene el colegio. Da la sensación de que en esta sociedad nadie quiere hacerse responsable de ninguna de sus funciones. En mis charlas siempre pongo el mismo ejemplo: cuando un niño se está portando mal en un restaurante, la madre le dice "te va reñir ese señor", refiriéndose al camarero. Ningún padre quiere reñirle a su hijo, pero es que son ellos los que tienen que reñirle en todo caso. Curiosamente, España es de los pocos países donde hay sitios que prohíben la entrada a niños.
Hay una primera educación que se recibe en la familia. ¿En tus 25 años de maestro has notado cambios en cómo llegan los niños al colegio? ¿Mejor o peor educados de sus casas?
Muchísimo peor educados. Nosotros tenemos un problema con respecto al norte de Europa, que es en quien nos queremos reflejar. Cuando uno visita esos países se da cuenta de que la educación familiar todavía tiene un componente muy importante. Tengo compañeros que vienen de Alemania, de Suecia, que cuando ven como trabajamos dicen que es tremenda la cantidad de tiempo que perdemos en el aula pidiendo silencio, que atiendan, que saquen el material, revisando si han traído todo. Porque esa parte de la educación que no corresponde a la escuela, sino a la familia, no se está realizando. Es uno de los grandes problemas: de una hora de clase perdemos entre un diez y un veinte por ciento en estas cuestiones. Cuando me preguntan qué nos falta para parecernos a Finlandia, yo digo: finlandeses. Como cultura social somos un país con muy poquita responsabilidad, y eso afecta muchísimo a la escuela.
[...] Hoy la educación emocional es fundamental por la cantidad de influencias que tenemos los seres humanos [...]
Escribiste que el fracaso de muchos alumnos no está relacionado con sus capacidades, sino con su desequilibrio emocional, porque han sido abandonados emocionalmente por sus padres y son educados por la calle o por la Play. ¿Debería haber una escuela para padres con evaluaciones como os quieren poner a los profesores?
La educación emocional es un tema que me preocupa mucho porque llevo trabajando en ella desde que empecé, hace veinticinco años, y creo que lo que se está haciendo hoy con la educación emocional es destrozar emocionalmente a los alumnos. Estoy convencido que la educación emocional se ha confundido con educación para la felicidad, pero una felicidad absurda, no basada en el esfuerzo. Es como explicar a los niños una imagen de Nadal sacando su trofeo porque ha ganado Roland Garros, pero no explicarle todo el proceso que hay hasta llegar ahí, al éxito. Nos estamos quedando con la imagen, con la frase bonita, con la frase del Facebook. Hoy la educación emocional es fundamental por la cantidad de influencias que tenemos los seres humanos, y hay que prepararnos para el fracaso, para el éxito, para un "no" en un empleo, para muchas cosas que dependen de tu potencia emocional. Y la escuela tiene una parte de responsabilidad, nosotros podemos hacer juegos de dinámicas para que los alumnos aprendan a detectar qué tipo de emociones hay, la emoción en el otro, la empatía, pero el 90% de la responsabilidad de esa educación es de quien pasa más tiempo con el niño, que son sus padres y que tienen que ser el ejemplo de esa fortaleza emocional.
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